Por: Jesús Silva R.
Esta vez me atreveré a lo imposible,
Y mi poesía será la fuerza increíble,
Volver a hallarte no será mi sueño roto,
Y tal vez hoy si me dediques tu foto.
Está bien, lo reconozco...
Mi timidez me hace malas jugadas,
Me enamoré, pero tu no sabes nada.
Fui el poeta ante el público, pero tan mudo ante tí,
El tiempo se me ha acabado, y ya no estás más frente a mi.
De ahora en adelante...
Menos tímido seré,
Yo sé que me hace falta,
No me preguntes por qué,
Pero es que si te hubiera hablado,
Todo sería al revés.
Este fue mi karma y mi cruz,
Laberinto incomprensible,
Del mundo fui el más callado,
Misterioso inaccesible.
En el inicio del retorno...
Sé que el mundo hoy se opone a que te vea,
Pero tu mirada logró tanto estremecerme,
Que necesito aproximarme como sea,
Aunque cuesta ahora saber si puedas verme.
Quiero ser luz, que la tristeza elimine,
Será en la cruz, cuando mi amor adivines.
Seré ese santo, aquel que desconociste,
Más que asumiste, después de que luchó tanto.
Seré oración, que por siempre rezarás,
La protección que eterna te seguirá.
Un día sabrás, que yo he venido a salvarte,
Y adorarás, a quien siempre quiso amarte.
Me elevaré, dejando atrás la tiniebla,
Y volveré, mezclándome entre la niebla.
Me abrazarás, y entonces te miraré,
Celebrarás, el modo en que aterricé.
Será la historia feliz, algo que nuca fue visto,
En tu nariz, mi vuelta triunfal, insisto!!!
Porque siempre lo creí, aunque todo había perdido,
Porque nunca desistí, aunque tu no hayas sabido
